No es casualidad que en libros y en películas idealistas los artistas aparezcan representados en el marco de una geografia peculiar, en una casa alejada de los ruidos de la ciudad, en fin, en un lugar donde la tranquilidad permita que las sensaciones se potencien dando paso a la inspiración.
Así, el hombre crea un punto de huida de todas esas cosas que lo perturban. Busca aquel lugar donde la naturaleza brinde sus mejores paisajes, aire puro, el cantar de los pajaros... ser "Uno y el universo".
De esta forma, el territorio entre las sierras y el mar constituye una zona perfecta para la distensión. Y esto es lo que encontramos en Playa Grande. Se encuentra muy próxima a Piriápolis, la cual le brinda todos sus servicios, pero conservando lo agreste de la geografia lugareña. Esta zona esta despojada de comercios y otros servivios, volcándose esencialmentalmente a la vivienda. Alli encontramos en abundancia casas de veraneo, lo cual delata que en el resto del año, excepto algún fin de semana, no hay practicamente ninguna actividad en el lugar.
Paz, tranquilidad, silencio, un deleite para la vista, son sensaciones que indudablemente busca el hombre de ciudad alejandose de su realidad cotidiana, y esto es lo que encontrará aqui...
